16 febrero 2011

Guía apocalíptica (4): Aprendiendo a sobrevivir en el Apocalipsis

Atención: este artículo contiene alerones muy feos (spoilers), así que si no quieres acabar más confuso que Sergio Ramos leyendo un diccionarió catalán-inglés, empieza por el principio si aún no lo habías hecho, de lo contrario serás castigado con la pena de ir disfrazado de Hitler a una sinagoga judía mientras Angela Gossow te insulta con gritos guturales a dos centímetros de oreja.

En este capítulo hablaremos del grupo, del refugio y las medidas primarias que deberíamos tomar en un mundo governado por los gules.
¿Tienes ya un grupo fiel?, ¿y un líder seguro y razonable en él?, ¿habéis escogido dónde os instalaréis?, ¿tenéis provisiones?... Éstas son algunas de las preguntas que deberíais haceros al partir ante una amenaza zombi.

¿Cómo debe ser mi grupo?: No voy a poner reglas en la formación de los grupos, pero creo que lo ideal sería que estuviera formado por seis o siete personas, como mínimo, que clasificaré como "activas" (personas en perfectas condiciones físicas, con una edad entre 16 y 40 años). Es evidente que podrían haber también niños y ancianos en el grupo, pero los elidiré en caso de lucha, y sería bueno que el número de "pasivos" no superara al de activos (por ejemplo, por cada diez personas pasivas, dabería haber almenos quince activas.
También sería bueno que la proporción hombres-mujeres estuviera equilibrada, sobretodo por evitar desprecios, maltratos, violaciones... pero para eso será vital también que guardéis una convivencia y un respeto entre todos y cada uno. Acuerda un consejo con todos los miembros, imponed un orden social y unas normas y si alguien las infringe, aplicad el castigo que consideréis necesario (por mucho que ya no haya leyes a nivel político, no puedes permitir que se cree una anarquía sin sentido en tu grupo, acabaríais mal...).

Una vez hayáis huído de la zona infectada dirigíos al escondite que hayáis, previamente, escogido. Si la infección es rural o local quizá con algunas conservas y manteniendo la calma en tu casa, no tendrás que temer, pero si la cosa se tuerce y va a más pon en marcha la evacuación. Dirigíos a algún terreno llano de alta montaña (1000 metros mínimo) donde podáis asentaros y que esté alejado de cualquier urbe (Pirineos, Alpes, Escandinavia… en el caso europeo. Lo siento para los caseros, deberéis acostumbraros al frío, supone la mejor opción en el Apocalipsis). El viaje podría suponer que estuvierais muchos días en camino, así que coged las provisiones adecuadas a parte de las armas (que ya comentaremos). Id con sigilo (lo ideal sería ir a pie, pero si hay que hacer algún trayecto imprescindiblemente en algún vehículo, abandonadlo lejos de vuestro futuro campamento, el ruido puede ser mortal). Acampad por las noches y dormid por turnos (el descanso es vital) y siempre, siempre estad preparados para cualquier ataque.


Supongamos que ya hemos llegado a nuestro destino, ¿y ahora qué?: siempre hay la escasa probabilidad de que tu ingenio haya fallado y la zona escogida para sobrevivir en el Apocalipsis esté plagada de gules, si es así, lo siento amigo, deberéis seguir caminando hasta algún lugar seguro. La mejor opción para establecer un campamento, de todos modos, sería en algún valle entre montañas, con césped pero sin mucha vegetación que estuvieran a bastante altitud (cuanta más mejor), y que tenga almenos una salida segura y llana.
Una vez acampéis habrá que ponerse a trabajar, para evitar la aparición en tu frente de un zombi podrás instalar mecanismos sencillos de defensa.
Cava una doble barrera de huecos como si fueran trincheras, pero más hondo (lo que yo llamo "muros invertidos") alrededor de tu campamento. Esto debería daros un respiro en caso que algún zombi despistado diera señal de aviso, y para salir a buscar alimento o agua se pueden saltar fácilmente. También podéis instalar muros altos, sin dejar nunca de vigilar, o pequeños montículos para hacer tropezar los zombis si consiguen sobresaltar las "trincheras". Ten siempre en la cabeza que todos los métodos que podáis utilizar no son perfectos, que en cualquier momento debéis estar preparados para la lucha o, en caso extremo, para la huida. Ah, y tampoco olvidéis el silencio, debéis regiros con algún simbolismo que os permita evitar siempre la emisión de vocablos por si se encuentran cerca los zombis.

Si a largo terminio véis que el campamento no recibe ningún ataque o alguno suelto, enhorabuena, es seguro establecerse allí. Lo ideal sería que en ese punto contruyeráis alguna edificación sólida y con techo. Os garantizaría una mayor comodidad y si lo recubrís bien con colchones (o paja, hierbas, maderas) también un aislamiento de la emisión exterior de sonidos, que siempre jugará en vuestra contra si os despistáis.
Como decía, la vigilancia también es un punto clave, sería aconsejabe hacer un equipo diurno y otro nocturno (es evidente y claro que habrá personas que rindan más por la noche o al contrario, no debería ser muy difícil dividiros).

¿Y cómo vamos a sobrevivir?: Evidentemente, en un mundo apocalíptico, la comodidad de sofá y nevera, desaparecería. Los primeros días en el campamento deberías poder pasarlos con las provisiones que tomaráis al huir, si no fue posible, deberéis recobrar el instinto cazador-recolector de nuestra primitiva humanidad. Con el tiempo, podriáis ir plantando un huerto en la zona e incluso, si tenéis oportunidad y aislamiento sonoro criar ganado.

Por acabar, deciros que si vuestro campamento es atacado por una multitud de la hostia de zombis, más vale que camiéis de posición, para eso tened siempre a mano lo imprescindible y no le cojáis cariño a vuestra "nueva Barcelona" (por decir un nombre de campamento).

Debemos estar alerta...

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